jueves, 7 de junio de 2012

Ética y política en la República Dominicana

 Ética y política en la realidad dominicana



Lic. Eduardo Rey Rivas
La ética es el conjunto de normas morales que rigen la conducta humana, por su lado la política es la actividad del ciudadano cuando interviene en los asuntos públicos con su opinión, con su voto, o de cualquier otro modo.

Resulta difícil establecer los valores y principios de conducta que deben regular la acción de los hombres que hacen política con el fin de conseguir la seguridad y el bien común de todos los individuos que forman parte del Estado. De igual forma, la relación que existe entre ética y política contiene una serie de contradicciones claramente delimitadas.

En este sentido, creemos que la ética aplicada al ejercicio de la política no podría producir, valores éticos y morales que impulsen al desarrollo de la buena práctica política y del rechazo de la mala. Pues en este país es típico que la política no se utilice para alcanzar fines particulares.

Rey Rivas y Rosanna Cruz
El filósofo Eduardo Rey Rivas, nos comenta que es difícil que estos dos conceptos, en la realidad dominicana, se entrelacen debido a que la mayoría, denotando excepciones, las personas que hacen política no saben apreciar el bien común y van en busca de posiciones privilegiadas en el gobierno para jactarse de sus beneficios. “En la mayoría de los casos los funcionarios dominicanos tienen muy poca conciencia de lo que es el bien común, van a los puestos públicos a buscársela”, indicó.

Basándonos el principio de Maquiavelo, funcionario, filósofo político y escritor italiano, que nos dice que: “teóricamente es posible una relación entre ética y política, pero en la práctica ésta es imposible porque la política requiere comportamientos inmorales”.

Parece ser que en República Dominicana se toma en cuenta este principio y más aún, ponerlo en práctica. 


Lo que se dice y no se practica




"El poder no es para usarse. El poder es para servir, para ser útil al pueblo, para educar, para crear y distribuir en forma justa la riqueza”. Palabras emitidas por nuestro actual presidente de la Republica, doctor Leonel Fernández, en su discurso pronunciado el 11 de enero de 2004.

Dirigente del PRD Andy Dauhajre
Para el economista y dirigente del PRD, Andy Dauhajre que  El poder es para servir, no para servirse de él, solo puede verse en los discursos.  “Debería ser lo que aplique, eso está muy bonito para los discursos, pero a la realidad  es totalmente diferente”, así respondió el Sr. Dauhajre al preguntarle acerca de esa frase de acuerdo a la ética y la política.

Alcanzar el poder  a través de los puestos públicos es una tarea a la que se han dedicado muchos, argumentando que desde allí podrán ayudar a sus compatriotas más cercanos y hacer sus aportes para que el país se desarrolle, pero como afirma este dirigente del PRD, lo que ven es una oportunidad para hacer riqueza. Eso es lo típico en nuestro país.

Hacer o no hacer lo correcto
Los que están en el poder dejan de un lado la ética y la responsabilidad que conlleva estar en una posición en donde su principal tarea es velar por la nación y el bien común, y parecen actuar con el fin inconsciente o consciente de crear distorsión en la palabra “poder” sacando de su definición el concepto de ética.

Nuestro entrevistado plantea que nuestros dirigentes ven los puestos del Estado como una oportunidad que se les “brinda” para de forma  lícita o no asegurar riquezas que garanticen el bienestar familiar, agrega, que hay personas que llegan al Estado sin ninguna preparación, lo que contribuye al despilfarro actual de la República Dominicana y su falta de desarrollo.


El comportamiento antiético es normal en la política





El comportamiento antiético se ve en todos los procesos políticos del país, en cada uno podemos ver a cada quien “defendiendo su parcela” y embarcándose en luchas absurdas de las que no se saca ningún provecho.


Dirigente del PRD Andy Dauhajre
El comportamiento de los políticos y miembros de los partidos dominicanos revela que la ética es escasa y a veces nula en esas organizaciones que al parecer no buscan realmente defender sus ideales, sino como afirma el señor. Dauhajre “se perciben como trampolines para llegar al Estado, asaltar el Estado, enriquecerse”.  Para la gente eso es normal y está bien, pues se ha llegado a pensar que aprovecharse de una posición es parte del día a día de los políticos y que si los que estarán mañana también lo harán no hay que ser tontos tratando de ser correctos, si igual se piensa lo contrario.

Educar a la población y hacerles ver que vamos por mal camino es un punto clave para que el comportamiento de las nuevas generaciones sea honesto y decente. De ello depende que se tome conciencia sobre lo que está bien o mal.

El anhelo del poder, junto con la avaricia, el afán del fácil enriquecimiento delatan la falta de ética en los dirigentes políticos que tanto amenaza y daña al Estado y a la sociedad. Para defenderse de esas lacras son necesarios mecanismos políticos, administrativos y jurídicos. Montesquier propuso que el poder detenga al poder, los sistemas de publicidad y control de la gestión pública, política y administrativa y los mecanismos de responsabilidad de los gobernantes y servidores públicos.

Sin el correcto proceder no es posible tener una visión clara de cuáles son los ideales por los que se deben trabajar y menos tener y entender un verdadero plan de nación.

 Ser éticos nos acerca a una mejor sociedad


Vivimos en un mundo en el que todos compartimos ideales distintos, en el cual se cumple aquella máxima antigua de que "todos somos diferentes", y es en ese mundo donde surge una propuesta de igualdad y justicia social denominada "ética civil".

Nelly Cuello
La ética civil o ciudadana busca la convivencia entre los seres humanos en una sociedad moralmente pluralista, mediante la definición de unos mínimos éticos, que permitan el desarrollo de las individualidades y de los proyectos colectivos, mediante el diálogo, la responsabilidad, la solidaridad, el respeto activo, el reconocimiento de la igualdad y de la diferencia entre los seres humanos.

Podemos afirmar que con la ética civil podamos construir un mundo más justo, uno que proteja la igualdad y que sea equitativo para todos. La ética civil nos ofrece elementos para la reflexión en torno a la convivencia y nos plantea alternativas para lograr armonía en las relaciones entre los seres humanos en los distintos ámbitos de desempeño.

Todos somos parte
Muchos han llegado a la conclusión de que en nuestra sociedad hay  fallos y males que parecen que nunca van a ser corregidos porque los valores éticos no son los pilares de la política dominicana. Es fácil pensar que si los políticos actúan de acuerdo al marco de lo correcto nuestra sociedad funcionaria mejor y que alcanzaríamos el sueño anhelado,  tener un Estado de derecho donde se garantice el bienestar,  para Nelly Cuello, consultora política y de cambio climático, esto no depende de un grupo que se encuentra aferrado a un poder o una determinada posición social, sino, más bien, a todos los ciudadanos que dentro de un marco de actuación deberían regirse por valores y principios éticos, esto determinará así una mejor sociedad basada en la ética, equidad y nos complementaría como nación.


Los políticos éticos son un ejemplo



En el país ciertamente existen políticos que basan sus actuaciones en la ética y el bien común.

Gregorio Liriano, secretario de acta del Colegio Dominicano de Ingenios y Arquitectos  (CODIA), señala que en la República Dominicana aún quedan políticos éticos.

Ing. Gregorio Liriano
Su afirmación se basa en que hay quienes por su buena trayectoria política han demostrado trabajar de acuerdo a principios éticos y que eso es  lo que han empleado para alcanzar y mantenerse en la posición que ocupan y que por ello se han ganado el respeto del pueblo dominicano.

Si bien es cierto que no todos nuestros dirigentes asignados a una institución de carácter público o a un alto puesto en el gobierno han de pagar por aquellos que hacen del poder “la planta del propio lucro”, la realidad es que en este aspecto solo de un porcentaje mínimo puede decirse que trabajen en función de lo correcto, garantizando así los derechos fundamentales de los que representan. Lo importante es que aún hay quienes creen que lo mejor es trabajar guiados por la ética y tal y como afirma el ingeniero Liriano “peor hubiese sido que no hubieran políticos éticos”.

Rosanna Cruz y Gregorio Liriano
Para esos que sus intereses particulares pueden anteponenerse a los proyectos de nación que pueden formar hombres y mujeres de bien a base de una educación avanzada y adecuada para estos tiempos, centros de salud que permitan una vida saludable a los dominicanos, la imposición de medidas que beneficien a la mayoría y no patrocinadores del monopolio económico, esos son un ejemplo que los demás deberían seguir.

Que aún queden de ese tipo consuela y le da una esperanza a los dominicanos  de que todavía existe la posibilidad de haya quienes produzcan un cambio en la forma en cómo se dirige el país.



Contribuyentes:

  • 2009.1233-Laura -  Báez
  • 2009.1444-Odayris Figueroa
  • 2009.1453-Mariela Durán
  • 2009.1497-Cristopher Peña
  • 2009.1555-Loanmy - Álvarez
  • 2010.0046-Rosanna Cruz
  • 2010.0047-Ruben Guillermo
  • 2010.0236-Lisa Gómez





















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